-¿Ahora resulta que quieres intentar controlar mis actos a tu antojo también? Tiene que ser una broma (de muy mal gusto, además).
Tiró todas las piedras de sus bolsillos al suelo, con fuerza. Estaba harta y no la dejaban explotar.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario